Aparato inventado, o perfeccionado al menos, en los Estados Unidos, para registrar mecánicamente las reacciones psicofi- siológicas de las personas cuando son interrogadas y poder determinar la veracidad o falacia de las declaraciones. El fundamento de este notable auxiliar de la justicia se encuentra en el constreñimiento psicológico interno cuando no se desea hablar ni siquiera pensar acerca de lo inconveniente o ingrato. Observaciones tan sutiles como exactas han demostrado que el agente puede mantener impasible su expresión, por hábito o fuerza de-voluntad; pero que ciertas funciones orgánicas, como la respiración, la circulación de la sangre, e incluso incipientes movh mientos musculares, escapan por completo al dominio de las personas.
El detector de mentiras, conocido científicamente como polígrafo, se debe especialmente a Larson, que perfeccionó el procedimiento de registro «de las variaciones en la presión sanguínea con la asociación verbal. Este aparato es un compuesto formado por un cardiógrafo, para registrar las alteraciones del pulso; un galvanógrafo, para recoger el reflejo galvánico; un esfigmógrafo, que indica la presión de la sangre; y un neumógrafo, que permite advertir el movimiento respiratorio, (v. APARATOS REGISTRADORES.)