Nada menos que al rey D. Peiayo remontan algunos historiadores el origen de este organismo. Lo probado es que ya en la Edad Media funcionaba un Consejo de Guerra con atribuciones en las causas civiles y criminales del fuero castrense. Felipe II privó a este Consejo de su9 atribuciones durante algunos años. En 1714 consta de igual número de letrados que de militares. En 1717 quedó tan sólo reducido a los militares. En etapas posteriores ha recibido los nombres de Tribunal especial de Guerra y Marina, y los de Consejo o Tribunal Supremo de Guerra y Marina. En el Cód. de Just. Mil. esp. de 1890 fué estructurado este Consejo. En diversas evoluciones posteriores ha integrado la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo.