concepto acuñado por Bárbara Rogoff, que supone un proceso de implicación mutua en el cual los individuos son participantes de una actividad socialmente significativa. Se refiere, pues, al plano interpersonal. Las personas manejan sus propios roles y los de otros, y estructuran situaciones en las que observan y participan a la vez. La comunicación y la coordinación se dan en el curso de la participación en esfuerzos compartidos; cuando las personas intentan llevar algo a cabo, su actividad está dirigida y no es aleatoria o sin propósito. La comprensión de los objetivos involucrados en los esfuerzos compartidos es un aspecto esencial del análisis de la participación guiada. En las interacciones didácticas, son las acciones que realizan los docentes para beneficiar los aprendizajes de los alumnos.