Miembro de la Sagrada Congregación de Ritos, perteneciente a los consultores natos, que en las causas de beatificación y canonización tiene el deber de suscitar dudas, objeciones y reparos frente a la virtud y santidad del que sea objeto de proceso, sin perjuicio de poder votar después a favor, si así lo estima en conciencia. En lenguaje corriente, se le denomina abogado dei diablo.